Aliens Vs. Predator 2 (Opinión)

Algo flota en el cine que se hace en estos tiempos que lo convierte en una caja, más que de sorpresas, de hechos venideros previsibles. Cada día abundan más las películas cuya hechura tiene más de cartón piedra que de maderas nobles, y si encima hace referencia directa a clásicos del género que en su momento rompieron moldes, este problemas se agrava hasta convertirse en razón de auténtica preocupación.

Quién le iba a decir, ya no a Ridley Scott, sino a Dan O'Bannon, el gyionista, que aquella peli de finales de los 70 iba a marcar un antes y un después en el género del terror espacial. Quien conozca los avatares de aquel guión sabrá las inseguridades que había suscitado a los estudios, y los cambios que sufrió hasta que un debutante Scott aceptó el reto de dirigir la peli que a muchos nos hizo cerrar los ojos de peques ante la tele. En equella época se innovaba. No parecía haber fórmulas establecidas, o al menos es lo que parece mirándolo con la distancia de los años pasados. El rodaje de "Alien" estuvo plagado de genialidades, como improvisaciones, debates entre los actores y el director, intención de no dejar indiferente, todo lo que hace de una empresa algo artístico e irrepetible (os recomiendo que veáis los extras de la cuadrilogía de Alien).

Al contrario de lo que pudiera pasar, las secuelas no empobrecieron, sino que ampliaron ese fantástico universo de la Nostromo, la Weyland-Yutani, Ripley y las bestias negras sin ojos capaces de devorarte el alma con su mandíbula retractil. Dios, cómo me lo pasé viendo "Aliens" de Cameron, quien supo imprimir su visión a la franquicia: acción desenfrenada, el agobio y el drama de situación necesarios para que la salsa ligue... y la reina, esa reina a la que Ripley osa llamar "zorra" al final de la peli. Y para qué seguir (aunque podría decir algunas cosas no muy buenas acerca de "Alien: Resurrección").

Con "Predator" tres cuartos de lo mismo. En uno de los mejores papeles que creo recordarle a Arnold Swartzenegger, John McTiernan nos seduce con un cazador de hombres que, él solo, puede acabar con un equipo especial de mercenarios con la facilidad que nosotros nos sacamos un moco. Aquella película convertía la jungla en la Nostromo de sus víctimas potenciales y nos seducía con una tensión bien dosificada a lo largo de su metraje. Como solemos concluir mi cuñado y yo en nuestras veladas de hablar de cine, para bien o para mal, ya no se hacen pelis como en los 80. En el cine comercial apenas se intentan cosas nuevas, apenas se trata de transgredir los moldes establecidos por miedo al fracaso; pero es que si tienes éxito con una operación arriesgada, ¡creas una leyenda! Deben de haberlo olvidado en Hollywood.

AVP 2 es una de esas pelis que prometen grandes cosas, pero dejándote siempre con la mosca detrás de la oreja. Es un claro ejemplo de film realizado por "grandes entusiastas" de las sagas clásicas, lo cual me empieza a dar sinceros escalofríos desde que, en su día, me atreví a ver a Stallone en la piel del mítico y maltratado Juez Dredd... su perpetrador... perdón, realizador, también era un gran entusiasta de la serie de cómics.

Si todas las películas de las que he hablado al principio tenían una carga alucinante de interpretación e intencionalidad en la concepción y desarrollo de sus tramas y personajes, a AVP 2 le pasa todo lo contrario. No es por falta de actores famosos, que no hay ninguno, sino porque desde el principio te los presentan como "los que van a morir". De un plumazo, hemos eliminado todo lo que la tripulación de la Nostromo y el equipo mercenario de "Depredador" aportaron en su momento. La localización, un pueblo de Estados Unidos, nos pretende trasladar a la atmósfera opresiva de un entorno aislado tomado por bestias que superan al hombre en todos los sentidos, pero a la postre solo se consigue un pretexto vago que no llega a convencer, reforzado todo ello por un comportamiento de unos personajes que está cortado por el patrón sintético de la "cinefórmula" y que resulta de todo menos creíble (a ver, mujer, acabas de perder a tu marido ¿¿y tienes tiempo para chacarrillos??). Pero lo peor es que los hermanos Strause han convertido la franquicia en una especie de peli de terror de adolescentes (¡¡¡instituto incluido!!!), donde los personajes son pretextos para una giro argumental, y no elementos de la narración en sí.

Otra de las cosas que me han decepcionado de esta película es la contante guiñada a las entregas de las sagas clásicas, concretamente el "Aliens" de Cameron y el "Predator" de McTiernan. No exagero cuando digo que han copiado planos enteros (por no hablar de la música) que recuerdan, por ejemplo, el momento dramático del transporte blindado en "Aliens" o la autocuración del depredador en "Predator". Hasta el nombre de uno de los protagonistas (Dallas) está copiado al de uno de los personajes de "Alien: el octavo pasajero". Si los guiños no están mal, pero empiezan a apestar hasta que compruebas que son el eje de tu narración y no una insinuación fresca a otras películas. Vamos, que lo que quiero ver es una peli nueva, algo que me sorprenda, y no un refrito de lo que ya sé. Primero fue el Alien, luego la reina, luego el que Ripley tuviese una reina en la cabeza, y después que los predators usan a los Aliens para hacerse sus safaris, genial... Pero, ¿ahora qué? Ahora nada, porque donde hay guiños constantes no hay inspiración para innovar. Bueno, un poco sí.

El Predalien. Esa ha sido una de las sorpresas de esta película, así como el predator que la protagoniza (sí, es el prota absoluto y mola más que todos los infelices que hacen cola para morir) pero no han llegado a cuajar de ninguna manera. ¿Por qué? Por la necesidad de dar minutos a unos personajes humanos que no aportan nada al argumento y restan tiempo a los protagonistas de verdad: los monstruos. Ahí radica el problema: haces una peli con la intención de dar protagonismo a los bichos, pero se lo quitas porque tienes que meter humanos que no lo tienen pero han de tenerlo. ¿Complejo? Pues por eso la película peca de una descompensación que da pena. Eso sí, el predator y los bichos en general, soberbios. Y el guiño final (pero final, final) a la saga clásica de Alien, también muy bien, pero ya. Para de contar.

En definitiva, una peli plana, con personajes prescindibles en todos los sentidos y una presencia de bichos que no te deja satisfecho, aunque te deja alucinado las veces que salen. Prescindible, aunque mejor verla en el cine, porque si la dejas para el DVD puede ser nociva para el entretenimiento visual. No lo digo porque exceda de efectos especiales (que tiene poquitos y es de agradecer), sino porque en pantalla pequeña puede ser un bodriete...

Os dejo con los 5 primero minutos de peli comprimidos para que os hagás alguna idea.