U2 360º Tour - Crónica del concierto

Por Milán

Amanece en Barcelona, 2 de Julio de 2009, un sol de justicia ilumina la ciudad y en las inmediaciones del Camp Nou ya éramos cerca de 900 personas las que guardábamos cola y habíamos pasado allí la noche. A las 17:30 horas, se abrían las puertas del estadio y una incontenible masa de gente tomaba el mismo así como los espartanos tomaron Troya. La Garra se eleva a 50 metros de altura desde el suelo de cuyo techo pendía una pantalla circular y nada menos que 17 cámaras para hacer funcionar la misma, cuatro patas aguantan la estructura, conjuntamente, una innumerable cifra de altavoces en circulo cuelgan de la parte más alta, además de toda la parte baja del escenario constituida por una esfera de bafles, más de 100 millones de dólares cuesta poner esta gira en marcha, se tardan 5 días en el montaje del escenario y agarraos, hay nada menos que dos escenarios además del montado en Barcelona, uno en San Siro de Milán y otro en el Stade de France de París.

Como teloneros escogieron a los escoceses Snow Patrol, un grupo técnicamente muy limitado, cuyo único atractivo reside en la voz de Gary Lightbody, rock alternativo e indie rock amenizaron la espera de los cabezas de cartel, tocaron alrededor de 45 minutos un repertorio musicalmente vacio, en una actuación insignificante y poco digna para un grupo que trata de abrirse paso en la escena musical y que precede a un monstruo como U2.

Aguardaban ahora 45 minutos más de espera mientras los técnicos ultimaban detalles y montaban el equipo del grupo, asimismo, el estadio iba llenándose hasta no caber ni un alfiler.

A las diez en punto de la noche, se apagaban las luces, en los altavoces Space Oddity de David Bowie anunciaba el comienzo del show, bajo los focos, se acerca Larry Mullen a la batería, se coloca el pinganillo y aporrea su batería con fuerza el ritmo inicial con toques irlandeses de Breathe, se van acoplando Adam Clayton y The Edge que golpea el cuerpo de la guitarra repetidamente para conseguir el efecto de distorsión deseado y… BONO irrumpe, el impacto audiovisual es espectacular, el público enloquece, miles de flases junto con la mastodóntica garra iluminan el estadio, a partir de ahí, cuatro canciones seguidas de No line on the Horizon (salvaje) que el público acogimos entusiamados, los clásicos vienen inaugurados de mano de Beautiful Day. También hubo momento para recordar al malogrado Michael Jackson con dos versiones de este Billie Jean y Don’t Stop Til Get Enough.

Tras esto llegó el que para mí fue el momento más especial de la noche, por primera vez en la historia del grupo, interpretaban en directo una de mis canciones favoritas de todos los tiempos: Electrical Storm, mágica versión con un Bono que lo dio absolutamente todo, sin reservas, falsetes y notas de cabeza incluida, la espiritualidad que consiguieron fue absolutamente increíble llegando a emocionar hasta el llanto a más de uno entre los que me incluyo.


La siguiente sorpresa llegó con el temazo Unfogettable Fire, para el cual, la pantalla circular que había en la parte superior del escenario, comenzó a desgajarse hasta convertirse en un espectacular panal de color de unos 25 metros (en la 1ª fotografía se aprecia dicho efecto), las pasarelas que comunicaban con las plataformas exteriores del escenario giraban para que todo el grupo tuviese acceso al público y este asimismo pudiese disfrutar de cada uno de los integrantes de la formación. City of Blinding Lights y Sunday Bloody Sunday consiguieron erizarme el vello de la nuca, en esta última The Edge se dejó la piel, consiguiendo transmitir un feelin’ como pocos pueden hacerlo. Por cierto, el guitarrista sacó a escena unas 20 guitarras diferentes, esto dice mucho de él y nos muestra a un músico que pese a no ser un virtuoso técnicamente hablando, si lo es en el aspecto más importante, el musical, preocupándose en todo momento de los colores que cada canción requiere, como él, quedan realmente muy pocos.

Los clásicos no dejaban de sucederse así como las canciones del nuevo disco, demostrando así, que U2 no es un grupo que vive de las rentas, sino que está dispuesto a quitar auténticos himnos de su repertorio como New Years Day o I Will Follow, con tal de incluir temas de su último álbum, cosa muy de agradecer a una banda que lleva 31 años en activo desde su formación y que muy pocos de los dinosaurios que quedan hoy en día están dispuestos a hacer.

Destacar la compenetración que tienen como grupo, me llamó la atención ver la forma en la que se miran, ahí hay mucho de profesionalidad y complicidad así como las innumerables horas de ensayo que la banda dedica cuando está de gira, profesionalidad que Bono demostró en todo momento, el cantante es un auténtico showman así como lo fueron en su época Freddie Mercury o Mick Jagger, sus gestos y movimientos, su voz potente y fresca de comienzo a fin , reservándose en según qué pasajes con el fin de no desgastarse de cara a la extensa gira que todavía tienen por delante (muy inteligente). Ecualización perfecta, sonido poderosísimo sin llegar en ningún momento a la estridencia y una puesta en escena faraónica. Una experiencia que por más que se cuente y se vea en imágenes, jamás podrá equipararse a la magia que supone presenciar este espectáculo en vivo.

El Setlist del concierto fue el siguiente:

Breathe
No Line On The Horizon
Get On Your Boots
Magnificent
Beautiful Day
I Still Haven’t Found What I’m Looking For
Desire /Billie Jean/Don’t Stop Til You Get Enough
Party Girl
Electrical Storm
Unknown Caller
The Unforgettable Fire
City of Blinding Lights
Vertigo
I’ll Go Crazy If I Don’t Go Crazy Tonight
Sunday Bloody Sunday
Pride
MLK
Walk On
You’ll Never Walk Alone
Where the Streets Have No Name
One
Ultraviolet
With or Without You
’Ill Go Crazy If I Don’t Go Crazy Tonight
Moment of Surrender

Tirón en las orejas a la ciudad de Barcelona que dejó sin transporte público a las más de 90.000 personas que saliamos del estadio a eso de las 0.30 horas, ya que para acoger el concierto y hacer caja han sido los primeros; tirón tambien a la asociación de vecinos que han multado a U2 por el volúmen de los ensayos, ¿que raro no? nadie se queja cuando son fiestas de la Mercé o con las celebraciones de los triunfos del Barça de este año que se alargan hasta altas horas de la madrugada.

En cualquier caso, U2 brindó un concierto fantástico, desprendiendo una magia y un feelin' sin precedentes, que permanecerá de manera perpetua en las mentes y los corazones de todos aquellos que tuvimos la oportunidad de verles aquella noche de verano.