'Assassin's Creed 2', en honor al credo
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El contexto
La historia
Los videojuegos se están convirtiendo cada vez más en una experiencia cinematográfica, y 'Assassin's Creed' es uno de los más claros exponentes de este fenómeno. Sin ser la adaptación de ninguna película, esta franquicia ha sabido dotarse de una identidad propia y una autoridad que la ha convertido en una de las más jugadas y esperadas del año. Tanto es así que, a pesar de las notables carencias de la primera entrega, los desarrolladores han echado el resto en labores promocionales, entre las que cabría destacar el excelente corto que sirvió de precuela a esta segunda parte. Dicho esto, quiero compartir con vosotros las impresiones que me ha dado 'Assassin's Creed 2', sin duda uno de los títulos más ambiciosos de las pasadas Navidades.
El contexto
Siguiendo la línea genealógica iniciada por Altaïr en la primera entrega, nos centramos en Ezio Auditore da Firenze, hijo y nieto de asesinos aunque no lo sepa. La época es el Renacimiento y el lugar Italia, su cuna. De entrada creo que no han podido escoger mejor época y lugar para ambientar esta secuela, pues los ganchos históricos que tan bien ha manejado esta franquicia para nutrir su trasfondo son muy variados y numerosos. Es la época de las grandes familias que dominaban las repúblicas italianas, de los grandes pensadores y artistas que han moldeado muchas de nuestras concepciones vitales y de su arte y buen hacer, que finalmente vertieron luz al pozo medieval en el que se había sumido Europa. Es por ello que, a lo largo del juego, vamos conociendo personajes históricos de lo más variado, incluido el famosísimo Da Vinci, que nos acompañará a lo largo de nuestras aventuras y nos echará una mano en más de una ocasión.
Dentro de este marco de luchas de poder, bien fagocitado para encajar a la perfección en el argumento propio del juego (asesinos contra templarios y su influencia en el mundo), se ha logrado una ambientación impecable, que va desde la recreación de las magníficas ciudades italianas, sus paisajes circundantes y el ambiente urbano de la época, con heraldos dando noticias y vendedores gritando las bondades de sus productos, ya sean mercaderías de arte, aliemntos, armas o tejidos, hasta detalles tan nimios como el propio vestuario de las personas que las habitan o la propia música que lo envuelve todo, que cumple con creces su función ambiental sin que el jugador eche de menos que no se haya echado mano a piezas auténticas de la época.
La luz es otro de los protagonistas de esta entrega. Si en la primera parte había más filtros azules y el tono general era más oscuro, aquí comprobamos que el Renacimiento también es cosa de la proverbial luz de la campiña toscana, el reflejo en las baldosas de mármol veneciano o la luminosidad de los mercados y las calles de Florencia. Lejos de conformarse con eso, los desarrolladores han aprovechado para arreglar uno de los fallos del primer 'Assassin's Creed', y es que se ha introducido la rotación nocturna, con lo cual la experiencia de juego se redondea de manera increíble. Si nos demoramos en nuestras misiones, podremos ver una radiante mañana, seguida de una tórrida tarde y un lánguido atardecer, antesala de noches de luna llena, y vuelta a empezar. A nivel estético puede que sean modificaciones de cajón que ya se pedían a gritos en el primero, pero de reclamarlo a comprobarlo (y lo bien que está todo implementado) es una gozada.
La historia
El relato de 'Assassin's Creed 2' es sin duda mucho más elaborado que el del primer juego. Una de las principales diferencias es que conoceremos al personaje antes de convertirse en asesino y lo iremos siguiendo a medida que progrese y se vuelva un verdadero seguidor del credo de los de su gremio. Ezio empieza siendo un joven impetuoso que se entretiene peleándose con los vástagos de familias rivales y seduciendo a jóvenes aristócratas para espanto de sus conservadores padres. Se ha criado en Florencia y se conoce la ciudad al dedillo. Desde pequeño se intuye que ha escalado sus fachadas y recorrido sus tejados, lo cual, cómo no, le vendrá de perlas cuando se enfunde la capucha. Os recomiendo, los que no lo hayáis hecho aún, que veáis el corto que precede al juego, porque estaréis muy informados de las razones que conducirán a que Ezio tome el relevo de su padre y termine lo que él no puedo. No quiero arruinaros nada aquí.
La acción se enmarca en la rivalidad entre los Medici y los Borgia por el control de Italia, la cual encierra realmente una rivalidad mucho más antigua y que el juego insinúa que se remonta al inicio de los tiempos, la que enfrenta a dos facciones que, con los siglos, han cuajado en la facción de los templarios y la de los asesinos. No en vano, escucharemos la reveladora frase "esta guerra empezó mucho antes de que tú y yo nos implicáramos en ella". Cuanto más vaya profundizando Ezio en los tejemanejes entre las facciones, descubrirá que más graves son las implicaciones no sólo de dicho conflicto, sino de sus acciones directas en él.
Aun así, siendo la historia tan poderosa como aparenta, la sensación final es que apenas pasa el grado de excusa argumental para enmarcar un juego de estilo sandbox (mundo abierto y libertad de elección de misiones). Los personajes, algunos de ellos verdaderos regalos de la Historia, como el propio Da Vinci o el mismísimo Nicolás de Maquiavelo, se quedarán en meros comparsas para agilizar el ritmo y las opciones del propio juego. Sin duda, este sometimiento de estos y otros personajes al guión de juego más cortoplacista dejarán una leve sensación de vacío en los jugadores más exigentes con este apartado. Con todo, en justicia hay que decir que el resultado dista mucho de ser malo o cojo, especialmente en vista de un final verdaderamente excelente y que da pie a una apasionante tercera entrega. ¿Repetirán los desarrolladores con Ezio, un personaje que ha dado mucho de sí en esta franquicia? Al tiempo, pero a este servidor no le molestará en absoluto.
Otro dato: la historia paralela de Desmond pierde metraje en el juego, aunque no peso, ya que le empezarán a pasar una serie de cosas que nos darán muchas ganas de seguir sus propias aventuras. En todo caso, el protagonismo estará dentro del Animus, y no fuera, concretamente en los recuerdos de Ezio.
Jugabilidad
'AC 2' ha heredado todo lo bueno del primero y ha pulido los errores de los que se quejaban muchos. De hecho, los desarrolladores se han inspirado en un feedback directo de las cosas que pedían o echaban de menos los que disfrutaron de las aventuras de Altaïr.
El eje de la jugabilidad con Ezio, cómo no, se basa en dos aspectos: el combate y el movimiento. Esto último ya era algo notable en 'AC', y se ha ahondado en unos movimientos orgánicos y rápidos cada vez que Ezio corre por las calles de una ciudad o escala sus paredes. Lo intuitivo de los controles hace que sus acrobáticos desplazamientos por tejados y cornisas resulten de lo más fluido y cinematográfico, marca de la casa junto con la posibilidad de interacción con cualquier elemento del medio para saltar, escalar o esconderse. Mención aparte merece la gran novedad de que Ezio, a diferencia de su antepasado, sabe nadar, con lo cual saltar al agua es una forma ideal de despistar a nuestros perseguidores.
La fragilidad del anonimato de Ezio también ha sufrido cambios, puesto que ahora nos será mucho más fácil hacer cosas sin que los guardias nos persigan a muerte a la primera de cambio. Entiendo que tirarle la vasija a alguien es una faena, pero ¿tanto como para perseguirte a cuchillo? En este sentido, se ha implantado un sistema de grado de búsqueda (independiente por cada ciudad) que indica hasta qué punto somos considerados peligrosos y se nos reconoce. Se articula mediante una serie de carteles repartidos por los lugares más insospechados que podremos arrancar para reducir el grado de búsqueda. Si no queremos marearnos, siempre podremos sobornar al heraldo para que deje de alertar a la población y se ponga a hablar de aranceles.
Pero si no conseguimos librarnos de los perseguidores, aún nos quedarán alternativas de escondite y consiguiente abandono de los sabuesos. Como siempre, podemos sentarnos en un banco, escondernos en un montón de paja, en un pozo o, gran novedad, metiéndonos entre grupos de transeúntes y no salirse de su área de influencia para que no reparen en nosotros. También podremos contratar los servicios de las meretrices, que conseguirán distraer la atención de los guardias para que podamos colarnos en lugares vedados o sencillamente para hacer cualquier actividad que resulte más ventajosa sin ojos indiscretos. Los ladrones, por su parte, también distraerán a los guardias, pero molestándolos y provocando que salgan en su persecución. Finalmente, los mercenarios, nos seguirán y atacarán al objetivo que les indiquemos; ideales para entretener mientras tú vas asesinando con la daga oculta. Aunque siempre quedará la posibilidad de arrojar dinero al suelo, lo que hará que todo el que ande cerca se apelotone y entorpezca a los guardias... si es que no se paran también a coger unas monedas.
Como habréis deducido a estas alturas, el dinero pasa a formar parte importante del juego. Se ha desarrollado un sistema económico que hará nuestra vida de asesino más sencilla. Todos los servicios de los colectivos anteriormente mencionados son previo pago, pero también podremos invertirlo en armas, armaduras, obras de arte, tintes para la ropa y mejoras de la villa familiar de los Auditore.
Ganaremos dinero por cada misión cumplida, principal o secundaria y el rendimiento de la villa familiar.
Se ha incluido un enorme catálogo de armas largas, cortas y arrojadizas, cada cual con sus estadísticas y puntos fuertes y débiles. Las obras de arte suman prestigio a la villa (se exponen en sus salones) y la vuelven más rentable, aparte de reflejar el interés de las familias más ilustradas por el mecenazgo del arte y sus creadores. Los tintes de ropa son un regalo estético que, junto con las armaduras y lo anteriormente mencionado, proporciona un enorme grado de personalización de Ezio.
Combate
El combate es sin duda uno de los aspectos centrales del juego. La vistosidad del mismo, con las geniales maniobras de contraataque, sigue brillando tanto o más que en el primero, con unas coreografías fantásticas. Podemos usar todas las armas de Ezio: la daga, la espada o las cuchillas ocultas (sí, cuchillas, son dos, y ahora podemos ejecutar a dos objetivos a la vez), por no hablar de sus propios puños, que en contraataque son igual de poderosos. Cada arma tiene una forma estética distintiva de acabar con el enemigo, a cual más brutal, pero la gran novedad del combate viene dada por la posibilidad de desarmar a un contrincante y ejecutarlo con su propia arma. Esto es especialmente útil cuando nos enfrentamos a enemigos más brutos, completamente acorazados y generalmente armados con enormes espadones o hachas pesadas. No podremos hacer nada contra ellos con el clásico método del contraataque, por lo que habrá que enfundar y esperar al momento adecuado para arrebatara al enemigo lo que será su pasaporte al otro mundo.
Otro aspecto novedoso (y necesario) es la incorporación de varias posibilidades diferentes de ejecución. Ahora podremos acabar con enemigos encaramados a cornisas, arrojándolos al vacío, desde los montones de paja o desde un punto alto, aterrizando mortalmente sobre ellos. El juego invita en este sentido a experimentar sobremanera, dada la enorme variedad de las misiones.
Misiones
Y es que, a diferencia de 'AC', aquí no nos limitaremos a acabar con quienes abusen de los débiles o con los objetivos de la misión. Aparte de las misiones principales, hay un gran abanico de misiones secundarias con las que podremos ganar mucho dinero. Desde asesinatos, hasta carreras por los tejados, pasando por búsquedas de reliquias familiares en las criptas y misiones de correo cronometradas. Se nota que los desarrolladores se han esmerado para pulir uno de los principales fallos del primer título de la franquicia. Tal variedad insufla un aire muy fresco que hará que no nos aburramos en ningún momento y quedemos a salvo de toda monotonía.
Y todo tiene una recompensa, sobre todo las misiones en criptas, gracias a las cuales, sorteando puzzles al más puro estilo 'Prince of Persia', recabaremos objetos que podremos colocar en la cripta de la villa familiar, lo que, a la postre, nos permitirá desbloquear una vieja armadura familiar de un tal Altaïr... Y vaya con la armadura...
Entretenimiento didáctico
Una de las cosas que también llaman la atención es que el juego en sí es una pequeña lección de Renacimiento, capaz de despertar la curiosidad del jugador. A medida que recorramos lugares históricos o emblemáticos, irán apareciendo recuadros informativos que nos contarán las circunstancias y la historia de dichos lugares, como fechas importantes, anécdotas de su construcción, etc. Lo mismo ocurre con personajes de variable relevancia con los que nos iremos cruzando, escribiendo de forma anónima la Historia de Italia.
En este sentido, se enmarca una misión paralela que nos acompaña durante todo el juego. Se trata de una serie de símbolos presentes en los lugares más insospechados de todas las localizaciones que nos darán paso a ciertos archivos muy reveladores sobre el trasfondo más hondo del enfrentamiento entre asesinos y templarios. Los acertijos son de todo pelo, desde artísticos, hasta numéricos, algunos verdaderamente desquiciantes hasta que das con la pista tonta. A medida que resolvamos estos acertijos, tendremos acceso a unos archivos de vídeo en orden no secuencial. Sólo una vez recabados todos, se ordenarán y podremos ver hasta qué punto es antigua la épica de 'Assassin's Creed'. A mí, personalmente, me parece una forma magistral de moldear la mitología y la Historia de la humanidad a la sensibilidad argumental del juego. Os recomiendo que resolváis los enigmas, merece la pena.
Conclusión
Sólo me queda decir que todo lo antes mencionado, junto con un sonido, una traducción y una banda sonora excelentes y eficaces a más no poder al propósito del título, hacen de 'AC2' un juego redondo, versátil, luminoso, preciosista y muy, muy entretenido, con una rejugabilidad bastante alta. El final es brutal donde los haya y la invitación a una tercera parte excelentemente articulada.
Si aún no le habéis echado el guante, os recomiendo que no esperéis, vale lo que cuesta. Si ya lo habéis catado, decidme, ¿os ha gustado tanto como a mí?
'Assassin's Creed 2', en honor al credo
Reviewed by Omar El Kashef
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2:06
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2 comentarios:
Sabes bien que sí, amigo. Coincido en todo contigo y veo que te has tomado tu tiempo para hacer un sesudo informe del juego, que lo merece de sobra.
Estoy mas enganchado a estas alturas que con la versión anterior o el propio GTA IV, y es que es una delicia de juego. El que no lo pruebe después de leer tu articulo que lo cate sólo una vez y seguro que no podrá evitar comprarlo.
Veo que por una vez las compañías hacen caso de los usuarios y se lo curran como nunca para solventar las deficiencias de su versión primigenia, haciendo de la segunda un versión casi insuperable.
Acabo de conseguir las bombas de humo, así que sabrás ya por donde voy....y es que no puedo parar, voy a perder más horas de sueño que un tonto.
Un saludo
Ay amigo, las bombas de humo! Cuánto se echaba de menos algo así en el primero. Pues ya verás cuando consigas el pistolín... La leche, oiga!
Gracias por pasara, como siempre.
Saludos!
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